Girifalco - La Fuente del Diablo

Preciosa ornamentación de la iglesia de San Rocco en Girifalco

Hay monumentos que tienen algo especial independientemente de su mérito artístico. En Girifalco tenemos un buen ejemplo de ello, la fuente barroca dedicada propiamente al gobernador, un tal Carlo Pacino, que en 1663 decidió colocarla delante de la iglesia de San Rocco. Por Dios, una hermosa fuente, tallada en piedra local, con una balaustrada bien torneada alrededor, pero aún así un monumento menor.

Una leyenda en el origen de su fama

Excepto que, desde su debut en la escena de la ciudad, ha estado acompañada de unaura de leyenda. En efecto, se dice que los canteros encargados de la obra, tras haber preparado cada pieza en su cantera, las montaron en el corto espacio de un día. Así, los que habían salido de la aldea al amanecer para ir a trabajar al campo, la encontraron terminada al atardecer, como por milagro. Y ya sabéis cómo era, cuando ocurría algo extraño, algo que parecía violar las leyes de la naturaleza, la primera tentación era atribuirlo al diablo.

Los supersticiosos de siempre veían en ello la mano del diablo.

También hubo quien opinó sobre la ubicación, irrespetuosa, demasiado cerca de la iglesia y, además, con la apertura sólo en la plaza. Y también hubo quien interpretó una imperfección en la piedra como una pata de cabra a modo de firma del creador diabólico. Tonterías, por supuesto, pero que sirvieron para grabar la leyenda de la Fuente del Diablo en el imaginario común.