SHARRYLAND
Las emociones de Garda: la Strada della Forra
Del lago a la meseta por la direttissima, al principio tallada en curvas cerradas en la ladera de la montaña y luego arrastrándose por el fondo de un barranco.
¿Dónde está?
Qué es y dónde está
En primer lugar, decimos fórra, "del longob. furha (espacio entre surcos), desfiladero profundo de paredes verticales, muy juntas, debido generalmente a la fuerte erosión ejercida por el curso de agua que desemboca en él". Dicho esto, trate de imaginar una carretera que discurra por el fondo de un desfiladero de este tipo. La carretera provincial 38, como está inscrita en el registro de carreteras, salva en pocos kilómetros los 350 metros de desnivel que separan la Riviera Gardesana de Pieve, la principal localidad del municipio de Tremosine. Y lo hace con una sucesión de pasadas que no dejarán indiferente ni al conductor más experimentado.
Por qué es especial
Desde el lago, la Strada della Forra se eleva con una serie de curvas cerradas que calientan inmediatamente los neumáticos. La cinta de asfalto se aprieta entre la roca vertical y un muro bajo que convenientemente impide ver el precipicio. Luego pasamos del sol a la penumbra de la profunda garganta labrada durante milenios por las aguas del torrente Brasa. Aquí también, curvas cerradas, puentes y túneles. La calzada no permite el cruce de dos vehículos, por lo que de vez en cuando se produce un ensanchamiento justo. Muchos la han descrito como "la carretera más bonita del mundo"... sin duda es una de las más emocionantes.
Para no perderse
Al final del tramo más intransitable, la carretera respira un momento y se ensancha en el punto donde hay una trattoria estratégicamente situada. Aquí se puede hacer un alto en el camino para reponerse de las emociones, pero también para recorrer el último tramo del desfiladero: unas cuantas fotos de recuerdo son obligatorias, pero también se puede aprovechar para contemplar el entorno: las aguas tumultuosas del torrente, las briznas de luz que descienden desde lo alto, el vuelo repentino de un pájaro que se desvanece en la penumbra... Una experiencia aún más sugerente en la oscuridad, cuando el desfiladero se ilumina artísticamente, como en una película de aventuras.
Un poco de historia
Durante siglos, el desfiladero sólo estuvo atravesado por un sendero, que para los lugareños era el camino más corto para transportar los productos agrícolas de la meseta -madera, aceite, grano- hasta la orilla del lago para embarcarlos en barcazas rumbo a Desenzano. Todo a hombros A principios del siglo XX, se empezó a pensar en una "direttissima" calzada: promovida por el párroco, fue apoyada en el Parlamento por Giuseppe Zanardelli, político bresciano que ocupó importantes cargos gubernamentales en aquellos mismos años. Luego se trató de construirla, sobre todo mediante dinamita, desviando el torrente hacia un túnel.
Curiosidad
En 2008, la Strada della Forra participó en el rodaje de la película Quantum of solace, con el Aston Martin de James Bond lanzándose a velocidad de vértigo por las curvas cerradas. Sin ir tan lejos, los automovilistas de Tremosine que circulan por la carretera tienen una patrona específica, la Madonna della Forra, cuya efigie puede verse, al otro lado del arroyo, rodeada de velas, en una gran hornacina en la desembocadura del tramo más impermeable.
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