SHARRYLAND
En Perugia, una tejeduría exclusivamente femenina
Una antigua tradición artesanal perdura bajo las bóvedas de una iglesia.
¿Dónde está?
Studio Tessile Giuditta Brozzetti es una cooperativa que se encamina hacia su primer siglo de historia. El nombre de la fundadora encuentra continuidad en su bisnieta Marta que, junto con otras artesanas, mueve telares del siglo XIX para mantener viva una antigua tradición. La producción consiste en un surtido de manteles, cortinas, centros de mesa y toallas de baño. Es uno de esos casos en los que la artesanía roza el arte: las telas, de hecho, reproducen modelos medievales y renacentistas, a menudo tomados de cuadros de época.
Una hilandería en una iglesia
El Studio Tessile se encuentra en el interior de una iglesia medieval en la línea de la muralla peruana: San Francesco delle Donne, llamada así porque fue cedida por los frailes menores a las monjas benedictinas, que luego, en los años veinte, fundaron un instituto para acoger a niñas pobres de la ciudad y del campo. La iglesia desacralizada se convirtió así en una hilandería donde generaciones de mujeres peruginas trabajaron la seda.
Laboremus iucunde
El lema de la empresa es Laboremus iucunde, trabajemos con gusto, y éste es el espíritu de los cursos de tejido y bordado a mano que se organizan diaria o semanalmente para pequeños grupos de aficionados, principiantes o no. Es también una forma de apoyar una realidad única: un taller, ante todo, pero también un museo de sí mismo. Se organizan visitas guiadas con demostración práctica en el telar para grupos también en inglés.
Giuditta Brozzetti
Giuditta Brozzetti fue una pionera de la emancipación femenina. En los años veinte viajó por toda la provincia y la belleza del tejido tradicional umbro, que siempre había sido prerrogativa de las manos femeninas en casas y conventos, le infundió la idea de montar un negocio para proporcionar ingresos a las mujeres necesitadas. En 1921 abrió su taller y tuvo la intuición de dirigirse al público de las grandes ciudades, incluso de las americanas, que como Nueva York mantienen lazos más estrechos con Italia.
Curiosidad
En 2014, el fotógrafo estadounidense Steve McCurry, uno de los grandes nombres de la revista National Geographic y autor de portadas inolvidables, fue llamado a Perugia. El encargo consistía en realizar un retrato fotográfico de la región en 100 instantáneas, destinado a convertirse en una exposición, Sensacional Umbría. Entre los sujetos elegidos se encontraba Marta Cucchia, propietaria del Studio Tessile, fotografiada en el telar que perteneció a su antepasada Giuditta.
Para organizar el viaje
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