SHARRYLAND
Torre de Belmonte o Castrum Belli Montis
Un recuerdo solitario, disperso entre las colinas
¿Dónde está?
Qué es y dónde está
Un calzado cómodo para caminar y el deseo de un contacto profundo con la tierra de Gravina, en Apulia, suelen conducir los pasos fuera de la ciudad. Se pasan los yacimientos arqueológicos, que tienen mucho que contar, y se adentran unos kilómetros más en la campiña circundante. Y es aquí donde se divisa una colina, justo al borde del Bosco di Difesa Grande. En su cima, se encuentran los restos de una estructura en ruinas: la Torretta di Belmonte.
Por qué es especial
Hoy en día, este edificio domina el paisaje de colinas que lo rodea, envuelto en una atmósfera enrarecida y onírica que lo convierte en un lugar-no-lugar, atemporal, suspendido entre el encanto y la historia. Aparte de ella, los únicos signos de presencia humana son los campos cultivados, con sus formas precisas suavizadas por las ondulantes laderas. En el aire sólo se oyen los sonidos de la naturaleza: el viento, el susurro de las hojas, algún que otro pájaro. La torre parece ajena a todo esto, distante, como alguien que ha vivido tanto tiempo que está cansado, y mira a su alrededor con ojos velados.
Para no perderse
Son muchas las imágenes y similitudes con las que puede revestirse la torre de Belmonte. Puede aparecer como un ermitaño en busca de su iluminación. O un náufrago, perdido en el mar verde que le rodea. O un centinela, aún guardando el antiguo castro, perdido desde hace siglos. Pero no quiero extenderme demasiado en la lista. Al fin y al cabo, eso es precisamente lo que constituye parte del encanto del torreón: testigo mudo, deja que nuestra imaginación lo anime, le dé una identidad. Tómese un momento sólo para usted, escúchela, y podrá verla a través de su alma.
Un poco de historia
El torreón en ruinas es lo que queda de un asentamiento rural medieval que las fuentes registran como "Castrum Belli Montis". Gravemente dañado por un terremoto en 1456, el asentamiento vio el abandono definitivo del pueblo; sin embargo, la asistencia a su iglesia restaurada y reabierta duró hasta finales del siglo XVIII.
Curiosidad
El nombre de Belmonte, contrariamente a la creencia popular, no tiene nada que ver con la belleza del lugar. Al contrario, hace referencia a la evidencia de la fuerte enemistad entre los vecinos de esta aldea y los de los alrededores. Tales eran las disputas y batallas que el lugar tomó el topónimo de "belli montis ", o montaña de la guerra, de la discordia. De hecho, parece que ni siquiera un decreto del propio rey, Carlos de Anjou, consiguió poner paz entre las facciones enfrentadas. ¿Será este espíritu de lucha el que ha mantenido viva la torre, a pesar de todo?
Foto: Maria Galella (CC BY-SA 4.0)Entra en el Mapa de las Maravillas por descubrir de Italia y encuentra tesoros donde menos te lo esperas... Inspira, Recomienda, Comparte...
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