Tierras de las Colinas Euganeas

¡Bienvenidos y bienvenidas! Me llamo Anna Maria y quiero presentarte una tierra que quiero mucho: las Colinas Euganeas.

Un parque regional protegido desde 1989, 15 municipios, un centenar de colinas, más de 200 senderos transitables, villas, iglesias, abadías, castillos y mucho más. Las Colinas Euganeas, de origen volcánico, se alzan inesperadamente en medio del valle del Po. Son una zona para conocer y apreciar en sus múltiples vistas y en sus tradiciones culinarias, vinícolas y oleícolas.

Castillo de Catajo: aperitivo y recogida al atardecer

Con el tiempo, su microclima ha permitido la creación de zonas boscosas, prados e incluso matorrales mediterráneos típicos de lugares más cálidos; más favorable que una llanura muy húmeda y pantanosa, explica el antiguo asentamiento de monasterios, abadías, villas y cortes de campesinos, y hoy facilita el desarrollo de numerosos B&B, cortijos y hoteles. Además, los baños termales de la zona al norte de las colinas (Terme Euganee) siguen siendo un lugar de peregrinación para hombres y mujeres que acuden a las bañeras, piscinas y baños de barro curativo para buscar y, a menudo, encontrar curación.

La finca vinícola de Villa Mariani, con el monte Roverolla como telón de fondo y las históricas canteras de traquita.

A las Colinas Euganeas también se las llama "el cielo en la tierra". Incluso Francesco Petrarca pensó así cuando eligió Arquà como lugar para vivir serenamente los últimos años de su vida, y escribiendo a un amigo describió este lugar así: "Si pudiera enseñarte la segunda Elicona que he instalado en las Colinas Euganeas para ti y las Musas, creo de verdad que no querrías irte nunca.

Este es el lugar que me vio crecer, que amo y que debes venir a ver por ti mismo".

Casa de Francesco Petrarca, en Arquà