SHARRYLAND
Las fuentes del Clitunno
"El pequeño río más bonito de toda la poesía". - George Byron
¿Dónde está?
Qué es y dónde está
Entre Spoleto y Foligno, a lo largo de la Via Flaminia, existe un pequeño oasis que ofrece grandes emociones a quienes deseen visitarlo. Es una auténtica maravilla de la naturaleza, un pequeño parque formado por serenas y límpidas extensiones de agua bordeadas por majestuosas plantas, sobre todo álamos y sauces. El juego de formas y reflejos que se crea crea un espectáculo encantador, sobre todo en otoño, cuando la vegetación se viste de tonos cálidos y la luz se vuelve más rasante, creando un pequeño universo mágico de atmósfera amortiguada. ¿De dónde procede el agua? Directamente del subsuelo: se trata de las encantadoras Fonti del Clitunno.
Por qué es especial
Las Fonti del Clitunno son un espectáculo realmente sugestivo en el que sumergirse por completo y dejarse hechizar por su belleza. Una característica que este lugar ha mantenido inalterada durante siglos: su belleza es tal que para los antiguos romanos era un lugar sagrado, donde acudían a rezar al dios Clitunno. Ni siquiera los poetas permanecen indemnes a tal fascinación: Virgilio y Plinio el Viejo fueron de los primeros en cantar a las Fonti del Clitunno, para pasar, siglos después, a Corot, George Byron y Giosuè Carducci, que dedicaron una oda a este lugar. Esta es quizás la verdadera magia de este lugar: su serenidad y belleza son capaces de entrar en el alma y despertar emociones intensas e inolvidables.
Para no perderse
El oasis de las Fonti del Clitunno es siempre hermoso, pero se vuelve aún más maravilloso entre octubre y noviembre, cuando el otoño toma el campo con toda su espléndida paleta, creando un auténtico paraíso para fotógrafos y artistas. Si además quiere aprovechar la ocasión para visitar alguna maravilla arquitectónica, aproximadamente un kilómetro más abajo en el valle hay un pequeño edificio llamado el Tempietto del Clitunno, porque en el pasado se pensó que estaba relacionado con el culto al dios Clitunno por sus formas clásicas. En realidad, se trata de una pequeña iglesia dedicada a San Salvador, muy sugestiva por el fuerte contraste entre la elegancia del exterior y la tosca sencillez del interior. Verdaderamente, ¡una pequeña joya que no hay que perderse!
Un poco de historia
En la antigüedad, el Clitunno era una vía fluvial que iba desde lo que hoy es el territorio del municipio de Campello sul Clitunno hasta Roma, y también tenía tramos navegables. Fue a raíz de un terremoto en el año 440 d.C. cuando cambió la conformación del Clitunno, pero para que el oasis alcanzara su aspecto actual hubo que esperar hasta mediados del siglo XIX, cuando el conde Paolo Campello della Spina hizo reorganizar los espacios, haciendo que las aguas desembocaran en el maravilloso laguito que hoy es tan fotografiado.
Curiosidad
Las Fonti del Clitunno no sólo atraen a los visitantes amantes de la naturaleza y la belleza, sino también a los habitantes acuáticos, especialmente cisnes y patos. Los amantes de los animales y los niños pueden disfrutar alimentando a los animales con piensos específicos que se pueden comprar en la entrada.
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