Finalmarina

Para no perderse

Cada 29 de junio, la fiesta de San Pedro, patrón de pescadores y marineros, se celebra con hogueras en la playa y una gran procesión. La pesada estatua del santo es llevada a hombros y bailada por los pescadores, que se descalzan para la ocasión y visten un hábito de tela áspera de color cerúleo. Llegan hasta la playa de los Negros y la de los Blancos para el Saludo al Mar, pero el momento más importante es el regreso: cansados por el largo viaje, los portadores corren, como si huyeran, por la escalinata y la nave de la iglesia. El silencio de la multitud es surrealista. Sólo respirarán aliviados cuando San Pedro se haya detenido ante el altar y se haya vuelto para mirarlos: si está recto, orgulloso y en eje, será un año sospechoso.

Un poco de historia

Diversos hallazgos arqueológicos en las alturas atestiguan la presencia de cazadores y recolectores en el Paleolítico, y de ganaderos y agricultores en épocas posteriores. Con la conquista romana en 181 a.C., surgió la primera zona habitada frente al mar, en el actual territorio del Rione Marina. A partir de la Edad Media, Finalmarina estuvo bajo el dominio de la familia Del Carretto, los genoveses (constructores de la fortaleza de Castelfranco sul Gòttaro), los españoles y de nuevo los genoveses. Posteriormente se anexionó al Reino de Cerdeña. En 1927 se unió a Marina, Borgo, Pia y Varigotti para formar el municipio de Finale Ligure.

Curiosidades

En el siglo XX, Finalmarina era conocida como la Ciudad del Vuelo: aquí nació y floreció Officine Piaggio, más tarde Rinaldo Piaggio SpA, fabricante líder de grandes aviones e importantes reactores ejecutivos como el legendario P180. La sede de las plantas de Piaggio Aereospace, así se llama la empresa en la actualidad, se encuentra en Villanova d'Albenga. Piaggio en Finale Ligure también fue responsable de la producción de los motores Rolls Royce Viper utilizados en los Frecce Tricolori de la Fuerza Aérea Italiana. Desde 2014, la planta de Piaggio en Finale ha cesado la producción.