Iglesia de Piedigrotta, en Pizzo Calabro

Qué es y dónde está

La pequeña iglesia de Madonna di Piedigrotta es en realidad una cueva excavada en la roca. Se encuentra cerca de las playas de Pizzo Calabro, al pie de una colina que domina las playas de baño. A menudo se dice que está tallada en toba, cuando en realidad es roca sedimentaria de origen marino. La historia de la Chiesetta di Piedigrotta está impregnada de cierta fascinación legendaria, debido a un relato, transmitido de generación en generación, que gira en torno al naufragio de una embarcación a finales del siglo XVII. Salvados de la furia de la tormenta, los marineros napolitanos supervivientes construyeron una capilla votiva a la Virgen, en el mismo lugar donde se encontró, intacto, un cuadro de la Virgen, guardado en el camarote del capitán, en la playa.

Por qué es especial

Por sencilla que sea la fachada exterior, construida con un estilo pobre, el interior, húmedo y fresco, además de ofrecer cobijo del tórrido calor de los días de verano, ofrece un espectáculo único: el espacio está dividido en tres grandes grutas, pobladas por figuras sagradas que toman forma de las rocas . Fue Angelo Barone, un artista de Pizzo Calabro, quien dio a la capilla su aspecto actual: a partir de 1880, aproximadamente, dedicó su vida a la capilla, amplió la gruta original y creó las dos grutas laterales, esculpiendo después muchas de las figuras de santos y escenas sagradas. A su muerte, en 1917, su hijo Alfonso continuó su obra durante otros cuarenta años. La iglesia, deteriorada por el vandalismo, fue restaurada a finales de la década de 1960 por su nieto, Giorgio, también escultor.